Se cree que Japón es uno de los países más caros del mundo y lo es, hasta cierto punto. También se cree que la comida en Japón es mayoritariamente a base de arroz pero el arroz es solo un pequeño aspecto de su gran gastronomía. Creer que solo comen sushi es como creer que los mexicanos solo comemos tacos. En realidad hay más matices gastronómicos en este gran país, como los hay en México, y su comida puede ser incluso más barata que en México si se sabe buscar bien; por ejemplo un ramen es mucho más barato aquí en Japón pues es un alimento básico para el japonés promedio mientras que en México se ha puesto de moda venderlo como comida “premium” (por ejemplo es común encontrar en Guadalajara ramen de más de 150 pesos mientras que en Japón ese mismo ramen no excede de los 390 yenes -aproximadamente 70 pesos-). Lamentablemente es una tendencia en México que muchas comidas extranjeras lleguen a nuestro país como si fueran alimentos premium; lo mismo pasa con cafés como Tim Hortons que en Canadá tiene precios muy asequibles y en México quieren darle competencia a Starbucks con sus precios que, si bien no son tan altos como en la cafetería estadounidense, lo son en comparación con los de Canadá. Quizá hable de eso en el futuro pero por el momento hablaré de las mejores comidas (y al mejor costo) en Japón.
Quizá sea Osaka la ciudad con mayor tradición culinaria de Japón, de aquí son los famosos takoyaki ( bolas de pulpo empanizadas y cubiertas de hojuelas de pescado y salsa dulce) y los okonomiyaki (una especie de pizza pero más suave, cubierta con varios ingredientes, que pueden ser desde fideos hasta carnes). Hay que destacar que la palabra “yaki” significa “a la parrilla” por lo cual, si hemos escuchado tanto el término en palabras como “teriyaki”, “yakitori”, etc. es porque dicho alimento está cocinado a la parrilla, y en el caso del okonomiyaki, las palabras “o konomi” significan “a su gusto”, así como en takoyaki, “tako” significa pulpo (si algún día pongo un puesto de tacos de pulpo, le llamaré “Tako Taco”). El takoyaki suele costar alrededor de 400 yenes por cinco bolas (aproximadamente 72 pesos) que definitivamente llenan por un buen rato. Normalmente la unidad más barata de comida que se vende en Japón cuesta alrededor de 100 yenes (aproximadamente 18 pesos) como una pieza de sushi, una pieza de takoyaki, una bola de arroz, un pan de melón, etc. El takoyaki es recomendable como comida o cena ligera.
Los fideos son la comida más básica, junto con el arroz, de los japoneses, lo puedes conseguir en diferentes presentaciones, el más común es el ramen que son fideos (importados originalmente de China) de trigo, los que más me gustan son el udon (fideos gruesos de trigo) y el yakisoba (fideos de trigo sarraceno a la parrilla, este último se sirve seco mientras el primero en caldo). Es común que cuando vas a un restaurante o puesto de ramen, te pregunten si lo quieres en “udon” o “soba” (soba, sin el «yaki», es básicamente fideos delgados de trigo sarraceno en la “sopa” en lugar del udon). Los precios son bastante accesibles, a menos que les quieras agregar más ingredientes; mi favorito, en este caso es el tonkatsu (chuleta frita de cerdo) que cambia un poco la consistencia del mismo ramen pues se prepara con un caldo más espeso de lo normal. Un udon o un soba con vegetales en tempura suele costar 390 yenes (aproximadamente 70 pesos) y con camarones o vieiras (o callos de hacha) suele costar cien yenes más. El tonkatsu ramen suele costar alrededor de 700 yenes (aproximadamente 126 pesos) debido a que contiene chuleta de cerdo, huevo y otros vegetales, básicamente con un ramen así tienes para toda una comida o cena completa.
Algo característico de la gastronomía japonesa es la capacidad de tomar algo extranjero y convertirlo en algo extraordinario. Se dice, por ejemplo, que la mejor pizza del mundo se vende y se come en Tokio pues un chef de allí fue a Nápoles a perfeccionar su estilo y al regresar a Japón se esmeró por conseguir una pizza “fusión” con elementos japoneses: usando ingredientes netamente japoneses como quesos locales, harinas locales, atún y vieiras como toppings, etc. Sin embargo esas pizzas no son precisamente baratas, he probado las pizzas japonesas y son una delicia, en especial las que tienen miel. Hay que destacar que dentro del tradicionalismo más puro aquí, se intenta que alimentos como el okonomiyaki sirva como sustituto de la pizza occidental. Por otra parte, las hamburguesas también cuentan con su propia versión japonesa, no en la forma de un alimento japonés sino como una “japonización” de la hamburguesa, como se hace en México en donde les ponemos jitomate, cebolla y chile. En Japón se encuentra una cadena de hamburguesas llamada Moss Burger y déjenme decirles que sus hamburguesas son deliciosas, en lo particular mi favorita es la de camarón empanizado con ensalada de col. Si bien no es en realidad barato, sí lo podría fundamentar como tal considerando que la comida rápida suele ser más barata fuera de México que comer en un restaurante tradicional. Otra vez en México los precios no van acorde con los ingresos que recibimos, desafortunadamente. Otras cadenas importantes son la surcoreana Lotto que es la rival directa de Moss Burger. Una hamburguesa de camarón con su ración de papas fritas y refresco de melón en Moss Burger, cuesta 800 yenes (aproximadamente 144 pesos).
Y de postre no hay nada más delicioso que cualquier cosa que tenga matcha (té verde molido), una de mis adicciones que conocí la primera vez que vine a Japón. Los matcha latte o las galletas o chocolates kit kat con matcha son sencillamente irresistibles. El matcha suele ser caro pero obviamente en Japón es más asequible, por ejemplo cien gramos pueden costarte menos de 1000 yenes (180 pesos aproximadamente) mientras que en México cien gramos de matcha costarían más de 250 pesos. Una deliciosa tarta de chocolate con matcha (ver imagen de abajo) cuesta 181 yenes (aproximadamente 32 pesos).
Y para terminar, para acompañar estas delicias culinarias con una bebida, recomiendo un refresco o soda de melón (la fruta más popular de Japón) y un calpis (bebida a base de agua, leche descremada y ácido láctico, es básicamente como beber un yakult hecho “refresco”), ambas bebidas cuestan entre los 100 y 150 yenes cada uno (entre 18 y 27 pesos aproximadamente) e incluso hasta veinte o treinta yenes más barato si se compran en un supermercado. La gastronomía japonesa low cost es deliciosa, ¿no creen?